Hay pequeños hábitos diarios que realizamos a veces de forma inconsciente que están afectando nuestra salud bucal, conócelos aquí para que los puedas evitar y lucir una sonrisa maravillosa.

Cuidar el esmalte dental -que es la parte más dura de nuestro organismo- de la placa bacteriana, es fundamental para prevenir enfermedades como la gingivitis o periodontitis. Estos son algunos de los malos hábitos que podemos realizar y que están afectando nuestra salud bucal:

• Fumar: Es uno de los peores hábitos para nuestra salud ora. Contribuye a una mayor acumulación de placa bacteriana y sarro en los dientes, y eso puede conllevar al aumento de la pérdida ósea en la mandíbula y enfermedad de las encías y pérdida de dientes.

• El modo en que se realiza el cepillado: Es fundamental cepillar los dientes con suavidad porque de lo contrario, podemos producir abrasión. También, es importante cambiar de cepillo al menos cada tres meses, no descuidar la limpieza de la lengua y usar hilo dental.

• Masticar cubos de hielo: De seguro te ha pasado que bebes un té helado o tu bebida favorita y te quedan hielitos en el vaso, es inevitable comenzar a morder los hielos por diversión o incluso en el verano por calor, pero eso puede ser perjudicial para la salud bucal ya que si hace con frecuencia, puede fracturar los dientes o producirles rajaduras.

• Morderse las uñas: Este es un problema muy común en personas con ansiedad, y de seguro si te sientes identificado también tienes el hábito de morder la tapa del lápiz. Morderse las uñas no es higiénico, puedes sufrir heridas, provocar infecciones digestivas y es pésimo para la salud bucal.

• Cepillarse inéditamente después de comer: Se aconseja esperar de 20 a 30 minutos después de comer para que los ácidos de ciertos alimentos se neutralicen y el calcio disuelto en la saliva se vuelva a pegar al esmalte. Algunos de los alimentos que tienen un alto contenido de ácido son las papas fritas, cítricos, bebidas gaseosas y el vino.

• Usar tus dientes como herramienta: Ya sea para destapar botellas, abrir envases, cortar hilo, abrir envolturas, cortar cinta adhesiva, partir nueves, sujetar las llaves, etc. Todo esto y muchos malos hábitos más, pueden fracturar y desgastas los dientes. Así que el mejor consejo es usar los dientes para lo que fueron hecho, morder y masticar nuestros alimentos.